Visitar talleres viviendo en una furgoneta camper
Algo que genera mucha ansiedad a la gente es qué hacer cuando la furgoneta se estropea y vive en ella.
Hoy os quiero hablar de esto.
Mis experiencias
Verdaderamente esta furgoneta se ha portado muy bien. La mayoría de averías no han sido urgentes, así que he podido elegir yo cuando ir a un taller.
Solo recuerdo dos veces que he tenido que ir al taller urgentemente.
La primera fue justo en la frontera entre Francia y Suiza, cuando de repente la furgoneta empezó a perder liquido refrigerante.
Tuve que visitar 8 talleres para que me pudiesen ayudar.
La siguiente fue cuando me quedé sin frenos bajando una cuesta.
Por lo demás, siempre la he llevado a talleres «cuando me venía bien». Normalmente estando en una casa.
Como por ejemplo, cuando cambié el motor entero.
La última experiencia
Esta vez visitaba el taller de Driver, Jusabi motor, en Vitoria-Gasteiz.
El plan era cambiar neumáticos, aceite, filtros y hacer una revisión de los frenos.
Lo primero agradecer al equipo de Driver y al magnífico equipo del taller Jusabi que miraron mucho más de lo que nunca me habían mirado la furgoneta.
Ese martes por la tarde, tenía una conexión en directo con la televisión en el canal de La Sexta, que haría desde la furgoneta.
Pero hubo algún contratiempo.
Los problemas
Hacía unas semanas, por mi cuenta, había pintado las llantas (y los contrapesos que van en las mismas).
Al tener que volver a alinear las ruedas, esos contrapesos había que moverlos. Por eso quedaría un hueco sin pintar que yo tenía planeado repintar en un futuro.
En el taller se tomaron la molestia de repintar las llantas para que no se notasen esos huecos. Buenísimo.
Aprovecharon para mirar a fondo la furgoneta y se encontraron algún problemilla que otro.
Una junta del palier estaba en mal estado (efectivamente metía ruido desde hacía tiempo) y había una pequeña fuga de gasoil.
Desde La Sexta me pidieron hacer una conexión en directo desde la furgoneta, para aprobar que todo iba fluido un par de horas antes de la emisión.
Pero mi furgoneta estaba sin las ruedas. Estaban esperando a que la pintura se secase para montar los nuevos neumáticos. Así que no la pudimos hacer.
A las 15:20, veinticinco minutos antes de la conexión con Zapeando, recojo la furgoneta con los neumáticos nuevos, los filtros cambiados y aceite nuevo, pero sin reparar los otros problemillas. Así pude grabar en la furgo, y pasar esa primera noche.
Al día siguiente en el taller comprueban que no falla uno de los palieres, sino que son los dos, así que piden el otro.
Para no dejarme sin casa, me devuelven la furgoneta y me dicen que me pase al día siguiente.
Conclusión
Si das con un buen taller, no te van a poner pegas en que recojas la furgoneta por la tarde/noche para poder dormir en ella (a menos que sea una avería muy grande y la furgoneta esté totalmente desmontada).
Para ellos es una faena, pero deben entender que es tu casa, no tu coche.
Hay que reconocer que somos el tipo de cliente coñazo, por eso debemos de ser extremadamente agradecidos.
El trato recibido y la profesionalidad que recibí en mi última experiencia gracias a Driver fue increíble.
Pero de todas formas, si no tenemos estas facilidades, siempre podemos alquilar una habitación o piso en AirBnb para pasar esos días.
Al final no pagamos un alquiler durante 365 días al año, así que nos podemos permitir incluso pasar una semana al año en un hospedaje de lujo. ¿No?
¿Te ha gustado lo que has leído?
😍
Si quieres ayudar al proyecto de Viajando Simple (y a una ONG):
- He publicado un libro. Puedes comprar esta guía para ti o para otra persona interesada en el mundo camper.
- ¿Vas a comprar algún producto en Amazon? Puedes hacerlo a través de mis enlaces, gano una pequeña comisión sin que a ti te cueste nada extra y así apoyas estos contenidos. O incluso puedes echar un vistazo a mis artículos favoritos.