Preikestolen en furgoneta camper

Preikestolen en furgoneta camper

Ir al Preikestolen en furgoneta camper es genial, os explicaré el motivo. Se trata de una de las atracciones más famosas de Noruega y yo la he hecho en Agosto de 2019.

Tengo que empezar diciendo que las vistas que tiene esta ruta son de las mejores que he visto nunca (por ahora). Y aunque si, hay bastante gente, merece la pena. Son como 5 kilómetros de subida entre rocas, es fácil de hacer, vi a mucha gente mayor y niños haciéndola, pero no penséis que son 5 kilómetros de pista.

Así es gran parte de la subída

Cómo llegar al Preikestolen en furgoneta camper

La ruta empieza desde cualquiera de los dos parkings que hay asignados para ello. Los dos cuestan 250 NOK (26€) por día entero, no puedes pagar por horas. El de arriba se llena bastante rápido, así que lo cierran y te obligan a aparcar en el de abajo. En ese caso tendrás que sumar otros dos kilómetros de subida a la ruta.

6 kilómetros antes de llegar al segundo parking, hay una pequeña área de autocaravanas con servicios gratis y además tienen una vista genial, aunque están muy cerca de una carretera por la que suben muchos coches y autobuses. Yo preferí dormir un poco más abajo, al lado de una comisaría y un supermercado, con vistas al fiordo.

En la subida por carretera hasta los aparcamientos del Preikestolen, verás que hay un montón de señales a los laterales de prohibido aparcar. Y algunos pequeños huecos que están precintados. Pero hay uno que no, ahí fue donde aparqué yo para ahorrarme los 26€ del parking. Me imagino que ese hueco estará ocupado la mayor parte del día, pero probablemente esté vacío si vas pronto a la mañana.

Cómo evitar la masificación

Hay gente que le llama la romería de Noruega, ya que al ser la más fácil de las tres rutas más famosas del país, está llena de gente. Como esto yo ya lo había leído, empecé pronto a la mañana, concretamente a las 6:00 am. Tampoco os creáis que iba solo todo el tiempo. Quería llegar rápido, así que fui a un ritmo majo, creo que adelanté a unas ocho personas (vaya diferencia con el Kjerag donde todo el mundo me adelantaba) no vi a más en toda la ruta.

Al llegar allí habría unas 15 personas. Tengo entendido que si vas a última hora del día tampoco te encontrarás con mucha gente, además aquí en verano anochece muy tarde. Los autobuses llegan al parking entre las 9 y las 11 de la mañana, así que evitar eso es muy importante.

Dormir en el Preikestolen

Preikestolen en furgoneta camper

Según llegaba a la famosa roca del púlpito, vi algunas tiendas de campaña repartidas por ahí. Así que me di cuenta que había gente que pasaba la noche arriba. Me dieron bastante envidia la verdad, si os gusta la acampada libre creo que puede ser una experiencia brutal.

La expectativa vs. la realidad

Llegué allí a las 7;30 de la mañana y ya había cola de gente para hacerse la famosísima foto. Me encontré con unos vascos que llevaban mes y medio viajando por Noruega y no paraban de preguntarme porque no me había hecho «la foto» todavía. Yo les hice algunas fotos a ellos, pero a mi posar en «la foto» no me hacía especial ilusión sabiendo que tendría cola detrás.

Me di cuenta de que la gente no se acercaba a la punta de la roca para disfrutar de la emoción de estar ahí, solo posaba para la foto y dejaba lugar para el siguiente. Escribiré sobre esto otro día porque desde que vivo en la furgoneta estoy aprendiendo algunas cosas sobre esto.

Preikestolen en furgoneta camper
Esta es «la foto»

 

Y este es el backstage.

Además de la famosa roca del púlpito, los alrededores son espectaculares, me pasé horas perdido por ahí caminando, comiendo y sacando fotos. Además que no había absolutamente nadie, todos estaban en la famosa roca.

Preikestolen en furgoneta camper

La bajada del Preikestolen

Empecé a bajar hacía las 12 del mediodía, era impresionante cuanta gente subía. En muchos momentos tenía que quedarme quieto para esperar a que la cola de gente terminara de pasar. Así que evitar empezar la subida de 9 a 12 si queréis huir de las multitudes.

Estaba bastante cansado de todos los kilómetros que había andado entre rocas (no estoy muy en forma, todo hay que decir) así que intenté bajar rápido para llegar a mi casa (mi furgoneta) lo antes posible. Esto fue un error ya que no disfruté la bajada, pero bueno, de todo se aprende.

La ventaja de visitar Preikestolen en furgoneta camper

Llevar tu hogar contigo siempre es una ventaja, pero en este tipo de rutas más. Poder empezar muy pronto porque tienes la cama prácticamente en el comienzo de la ruta, es algo que no tiene precio. Al igual que llegar agotado y estar en casa sin tener que conducir o coger un autobús.

Una recomendación importante para hacer esta ruta, es hacerla con buen tiempo. De los primeros 7 días que pasé en Noruega, este día fue el único que no llovió. Planear tu estancia en Noruega, cuando viajas en furgoneta camper, es mucho más fácil que si te hospedas en alojamientos que tienes que reservar previamente.

Aunque no visites Preikestolen en camper, te recomendaría ir con tu propio vehículo. Así evitarás depender de los autobuses que siempre van a las mismas horas y no te encontrarás subiendo a la vez que cientos de personas.


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