He hablado en más de una ocasión del método Wim Hof. Resumiéndolo muchísimo son unos ejercicios de respiración y exposición al frío que son beneficiosos para el estrés, la inflamación, sistema inmunitario y muchísimas cosas más.

Yo lo practico desde 2016.

Aquí tienes lo que escribí en su día sobre el Método Wim Hof hace ya un tiempo.

Qué hay de nuevo

Hoy he asistido creo que al primer taller de mi vida. Ha sido al de Andri Iceland (dos instructores del método Wim Hof).

El taller lo imparten una pareja, él islandés y ella española. Tienen una bonita historia donde se conocieron bañándose en una playa de Islandia.

Cómo empezó la empresa Andri Iceland

Tanit, vivía en Islandia, y después de un tiempo buscando algo distinto debido a su estrés crónico, escuchó brevemente hablar del método Wim Hof.  Un día se encontraba en la playa donde le habían dicho que el chico que estaba en el agua, había conocido al mismísimo Wim Hof. Así que se acercó y alucinó al ver lo tranquilo y sereno que estaba en las gélidas aguas de Islandia. Él de forma calmada le invito a entrar.

Es solo agua fría, nada más.

Así fue como esta pareja, que ahora esperan un niño, se conocieron.

La historia de Andri

Andri era un chico que a los 13 años tuvo un fuerte accidente que le dañó la espina dorsal y desde entonces sufría de dolores crónicos por todo el cuerpo. Sufría tanto en la vida que incluso pensó en suicidarse. Un día este islandés se cruzó con alguien que le dijo algo que le marcó. No te quejes y haz algo.

Al principio, como es normal, sintió que esa persona no sabía lo que él estaba sufriendo. En seguida empezó a probar cosas nuevas, probó diferentes métodos que no le funcionaban. Un día le hablaron del hombre de hielo, así que no lo dudó y acudió a uno de sus talleres.

Tras 8 meses de terapia de frío a diario, Andri no solo calmó los dolores que le habían acompañado, si no que recuperó las ganas de vivir.

Yo conozco el método desde hace tiempo, pero has sido impresionante como además de aprender mucha teoría, al cabo de dos horas, ya estaba sintiendo cosas que no había sentido antes. No estaba consiguiendo todo el potencial del método.

Lo mismo con la exposición al frío. Diariamente me meto en la ducha con agua fría (unos 12 °C), y para mí es una sensación estresante. Me muevo, canto y bailo a diario mientras el agua cae por todo mi cuerpo. Lo que pensaba hasta ahora es que 3 minutos de sufrimiento me daban 24 horas de bienestar.

La primera mañana del taller ya estábamos sumergidos en una bañera inchable donde habían metido agua fría y mucho hielo. Al cabo de uno o dos minutos salí calmado y alucinado. Le miré a Andri y le dije: Nunca antes me había sentido tan tranquilo en agua fría. Y casualmente era mi primera vez  en agua tan tan fría (1 °C).

Algo que nos repitieron todo el fin de semana es que todo está en nuestra cabeza y que lo podemos manejar con nuestra respiración.

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Este método es algo que es nuevo que se está expandiendo rápido, y lo entiendo perfectamente. Yo no puedo hacer otra cosa que recomendarlo.

Wim Hof tiene varios récords Guinness mundiales, pero no hizo todos esos retos porque sí, los hizo para llamar la atención y que científicos se interesaron en su método. Así han comprobado que Wim Hof no es ningún superhombre y que este sencillo método es capaz de enseñarlo, en unos pocos días, a cualquiera que esté interesado.

Si estáis interesados podéis visitar la web de Andri Iceland o la del método Wim Hof donde encontraréis una mini clase gratuita donde enseña a practicar este método. Yo ya estoy pensando en comprarme esto para llenarlo de hielo y bañarme dentro.

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