Inglaterra
Acabo de llegar a Inglaterra y me gustaría escribir sobre algunas cosas.
Se conduce por la izquierda.
No lo sabía, así que nada más bajar del ferry, empecé a conducir en dirección contraria. ¿Cómo no me avisó nadie? Claro como no leo las noticias…
Espero que no os lo hayáis creído 😉
No pensaba que conducir por el otro lado sería ningún problema para mí. Había conducido muchísimo en Australia por el mismo lado de la carretera. Tanto, que cuando volví a casa, si que me metí en dirección contraria en una ocasión. En ese momento había conducido más kilómetros en Australia que en España. La vuelta fue complicada si.
Cuando bajé del ferry en Dover, no contaba que estaría conduciendo con el asiento en el lado contrario. Me puse un poco nervioso, pero todo iba bien. Era muy divertido intentar entender cual era la velocidad máxima permitida viendo al resto de conductores. La velocidad aquí se mide en millas. Por cierto, tengo que enterarme, porque para indicaciones, además de millas, he visto yards, foot, inches…..
Enseguida me di cuenta de que los retrovisores son distintos el uno del otro, y que al adelantar en la autopista, tengo que mirar en el retrovisor más lejano de la posición de conducción. Los coches parece que están más lejos de lo que verdaderamente están a través de este espejo. O eso me parece a mi…
El Inglés
Por fin. Después de pasar por 7 países distintos aquí si se habla el idioma que conozco. Me encanta poder entender a la gente por la calle. Me siento muy cómodo comunicándome. Pensaba que el acento británico sería facilísimo de entenderlo, pero en estos pequeños pueblos del sur de Inglaterra, me he encontrado con una par de personas, que tenía que prestar muchísima atención para saber si quiera de qué están hablando.
El supermercado
El primer día fui al supermercado, un Tesco. A pesar de haberlos visto antes, nunca había estado en uno. Me encanta conocer los supermercados en otros países.
Al entrar allí sentí una sensación extraña. No sabía que era exactamente, pero algo me recordaba a mi etapa Australia. No le di mucha importancia y seguí comprando. Al llegar a los chocolates, ahí estaba. Mi marca de chocolates de Australia, llevaba sin verlo más de tres años.
Volví al principio del supermercado, donde comenzaron esos pensamientos. Lo entendí, Tesco debe de tener algún acuerdo con el que era nuestro supermercado en Australia, Coles. La sección de panadería y bollería tenía mucho mucho parecido, los chocolates y yo que se qué, me traían recuerdos.
Me ha extrañado ver que no es tan caro como recordaba. Por ejemplo las botellas de gas que compro para cocinar, son mucho más baratas que en cualquier país que he visitado.
Una cosa que no recordaba sobre Inglaterra es que es uno de esos países. Uno de esos paises, donde la gente no se saluda cuando pasea por el monte y se encuentra con otros. Una pena. Yo seguiré saludando y sonriendo.
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