Vanlife con gatos. ¿Es esto posible?

En esta ocasión, os contamos la historia de Pavarotti, así como la experiencia viajando con un gato y algunas anécdotas memorables y otras no tan memorables.

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La historia de Pavarotti

Cuando Iñigo acudió a la protectora de gatos y conoció a Pavarotti, no dudó ni un solo segundo en acogerlo. Digamos que por aquel entonces tenía una vida “normal”. En otras palabras, ni vivía ni viajaba en una furgoneta camper.

Un día decidió retomar lo que le hacía realmente feliz. De este modo, entrenó a Pavarotti para poder continuar el camino a su lado.

Cada noche, lo llevaba a la furgoneta para que se adaptase al olor y al espacio de ella.

Al cabo de los días, arrancó el vehículo para que se acostumbrase al ruido. Después, comenzó a hacer pequeños trayectos.

Al principio, Pavarotti no podía viajar más de dos horas seguidas, pues entraba en un estado de estrés y agobio.

Con el paso del tiempo, se fue acostumbrando un poco más.

Sin embargo, Pavarotti no estaba cómodo. La vida en furgoneta no le convencía del todo.

En 2018, Iñigo tenía planeado irse sin fecha de vuelta, así que Pavarotti se tomó un descanso y se quedó en casa con un amigo de Iñigo.

En enero de 2019, regresó y se llevó a Pavarotti al sur de Portugal. Estuvieron allí dos meses.

Tras una horrible experiencia, Iñigo llegó a la conclusión de que Pavarotti no nació para la vanlife. En esta ocasión, la vanlife con gatos fue un fracaso.

A día de hoy, Pavarotti vive en una casa en el campo. Cuando vuelve a «casa», Iñigo hace una visita a su antiguo compañero de viajes.

Vanlife con gatos. Consejos.

• Preparación. Antes de viajar, intentar que el gato se adapte. Debe familiarizarse con su nuevo hogar.
• Asegurar su bienestar. Comprobar que no se estrese y no se agobie.
• Escoger un transportín que sea cómodo.
• En los trayectos largos, realizar paradas.
• Ofrecerle comida al llegar al destino.
• Ofrecerle tranquilidad. No poner la música muy alta.
• Pedirle ayuda a tu veterinario de confianza.

¿La vanlife con gatos es igual para todos?

En resumidas cuentas, la vanlife con gatos puede llegar a ser una grata experiencia o por el contrario puede no llegar a salir bien del todo.

Recordemos que cada gato es un mundo.

Al igual que no todas las personas han nacido para vivir y viajar en furgoneta, no todos los gatos están hechos para la vanlife.

Si quieres puedes leer más artículos que ha escrito Iñigo contando sus experiencias.

O puedes escuchar la historia de Xino Xano que viajaron con tres gatos por Latinoamérica durante años.

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