Educación viajando por el mundo con El Vuelo de Apis| PODCAST
En esta ocasión, Ingrid nos habla de la educación viajando.
Además, nos cuenta algunos de los aprendizajes que recogió viajando con su familia.
La perspectiva que tiene de la vida es pura terapia para el alma.
Podéis encontrar este podcast debajo de este artículo o en cualquier plataforma de podcasting como iVoox, Spotify, Google Podcast, Youtube, iTunes.
¿Cómo es educar viajando? Viajar con niños
Ingrid y Andrés son una pareja que viaja de la mano de sus tres hijas.
Con su proyecto “El vuelo de Apis” tratan de luchar por una educación diferente, tanto para sus hijas como para el resto de niños.
Una educación basada en valores que no se limite a memorizar y vomitar.
Viajar te permite eso.
Se puede aprender en cualquier lugar. Todo es un viaje.
Esta familia tan inspiradora, se dedica a visitar escuelas para fomentar el emprendimiento de los sueños de los niños, jóvenes y adultos.
Recordemos que un niño feliz, será un adulto responsable.
No hace mucho comenzaron a escribir un libro contando sus anécdotas y explicando su proyecto educativo. Esperemos que pronto esté disponible.
Conexiones a través de la educación viajando
Ingrid y Andrés querían que sus hijas conocieran y aprendieran a conectar con aquellas personas que vivían en los lugares que visitaban. Y eso fue lo que hicieron.
A lo largo de un año, les acogieron 83 familias diferentes.
Tres años más tarde, siguen manteniendo el contacto con la mayoría de ellas.
Compartiendo dos o tres días tenemos una relación mucho más intensa y mucho más profunda con esas familias que con personas de nuestro entorno.
Es alucinante. Una persona que acabas de conocer, puede aportarte valores tan profundos como un amigo de toda la vida.
Son conexiones que no se pueden explicar.
Sin duda, para Ingrid ha sido una de sus mejores experiencias.
Cuando abres las puertas de tu casa, abres las puertas de tu intimidad.
Una educación diferente: Colegio Huerta Santa Ana
¿De qué sirve que un niño vaya a clase para memorizar y vomitar? ¿Qué sentido tiene eso?
Necesitamos niños felices que muestren motivación e interés por aprender, no una entidad virtual.
Afortunadamente existen proyectos como el del Colegio Huerta Santa Ana, una cooperativa que nació hace 40 años a raíz de un grupo de personas que buscaban una educación diferente para sus hijos.
En este capítulo, Ingrid también nos habla sobre la gran familia que han creado allí. Os invito a escucharlo y a dejar vuestra opinión.
Podéis seguir las aventuras de esta familia en Instagram, YouTube y en su página web.
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