Artículo escrito por 
Juan
(@laeternidaddelviaje)

Hay quien piensa que viajar y dormir en el coche es mejor opción que hacerlo en una furgoneta o caravana.

Si estás acostumbrado a moverte en tu furgo, puede que esto te sorprenda, pero un turismo tiene algunas particularidades que lo convierten en una forma muy atractiva de viajar.

Tal vez no tengas una camper o caravana, pero tu sueño sea tenerla en un futuro. Mientras lo consigues, ¿has pensado en empezar a disfrutar de algunas ventajas que ofrece ese estilo de vida, pero aprovechando el coche que ya tienes?

Sea cual sea tu caso, en este artículo encontrarás las ventajas e inconvenientes con las que nosotros nos hemos topado a la hora de viajar y dormir en el coche.

Ventajas de dormir en el coche

Cuando le contamos a la gente que solemos dormir en el coche durante nuestros viajes, su primera reacción suele ser de sorpresa.

Después, nos someten a un interrogatorio con las dudas más frecuentes sobre cómo dormir en el coche: “¿cómo vais al baño?”, “¿cabéis los dos?”, “¿pero eso es legal, etc. (seguramente muchas te sonarán).

Una vez asimiladas las respuestas, en muchas ocasiones esa preocupación inicial se convierte en una curiosidad e interés que lleva a algunos a querer probarlo.

No es para menos, ya que dormir en el coche tiene algunas ventajas que no encontrarás si viajas en furgoneta o caravana. La más evidente es el precio, pero hay otras de las que la mayoría de los viajeros no suele percatarse.

1. Precio más bajo

Es la principal ventaja que lleva a muchos a decantarse por esta forma de viajar. Como buscadores incansables de maneras de viajar barato, tenemos que reconocer que es la que más nos cautivó en su día.

Comparado con otras formas de turismo más tradicionales (hotel o apartamento), el ahorro es más que evidente. Pero también hay una gran diferencia si lo comparas con una camper o una caravana.

Aunque depende del tipo de vehículo, los gastos de mantenimiento y el precio de la gasolina de un turismo son más bajos. Por no hablar del desembolso inicial. Si ya tienes un coche, tan sólo tendrás que comprar un colchón para empezar a viajar.

Pero, aunque no tengas esta suerte, encontrar un turismo económico te resultará más fácil que una furgoneta. Al precio de compra súmale lo que probablemente tengas que gastar en camperizarla y homologarla después.

2. Puedes acceder a lugares a los que no puedes llegar en furgoneta

Un coche es más fácil de manejar que otros vehículos de mayor tamaño, lo que te permitirá llegar a sitios a los que no podrías acceder de otra forma.

Por otro lado, habrás notado que cada vez son más los lugares en que se prohíbe pernoctar en caravanas y furgonetas. Esto da lugar a una especie de vacío legal que nos ha permitido dormir en nuestro coche en lugares en los que no podríamos haberlo hecho con una camper.

En otros, nos hemos encontrado con una zona de aparcamiento para caravanas y furgonetas diferenciada de otra para turismos. Gracias a esto (o por culpa de esto, según para quién), hemos dormido totalmente solos en algunas ocasiones.

3. No llama la atención

Otra preocupación que nos ahorramos al viajar con nuestro coche es la de llamar la atención. Es sólo un coche, por lo que nadie se imagina que puede haber alguien durmiendo en su interior.

Esto no sólo es útil para evitar miradas indiscretas, sino también frente a posibles robos. Salvo que nos vean montar todo el tinglado para dormir, no levantará sospechas de que llevamos dentro todas nuestras cosas.

4. Es más fácil aparcar en ciudades

Acceder y aparcar en lugares masificados es más fácil. Si hacerlo en algunas ciudades ya es complicado con un turismo, no me quiero ni imaginar cómo debe de ser con un vehículo de mayores dimensiones.

Muchas veces, si no tienes un coche te verás obligado a dejar tu vehículo aparcado en las afueras o a pagar por un aparcamiento. En cambio, con un turismo será más fácil aparcar y te quitarás de preocupaciones.

Inconvenientes de dormir en el coche

Evidentemente, no todo es de color de rosas. Dormir en el coche también tiene algunos inconvenientes que no tiene hacerlo en otro tipo de vehículo.

Las desventajas comparándolo con dormir en una habitación de hotel o un apartamento son evidentes (falta de privacidad, menos espacio, exposición al clima…). Por eso, me centraré sólo en los inconvenientes frente a hacerlo en una furgoneta o caravana.

1. Menos espacio de almacenamiento

La falta de espacio es el principal problema con el que nos encontramos a la hora de dormir en el coche. Mientras visitamos lugares, dejamos nuestro equipaje en el maletero o escondido debajo de los asientos; pero el colchón y el resto del material que utilizamos para descansar nos quita algo más más de hueco.

A la hora de dormir, tenemos que dejar las cosas en los asientos delanteros o debajo del colchón (aunque tengo que decir que esto último nos sirve para nivelarlo).

Esta falta de espacio hace que no sea el alojamiento ideal para viajes largos, pero nos parece perfecto para aquellos de menos de una semana.

Por otro lado, esta forma de viajar nos permite hacerlo de una forma más simple y ser conscientes de que no necesitamos tanto como pensábamos para poder viajar y disfrutar del viaje.

2. Menos comodidad

Dormir en un vehículo grande suele ser más cómodo que hacerlo en un coche. El espacio aprovechable es menor, por lo que si sois dos personas puede ser algo incómodo. Pero no tiene por qué serlo.

Todo es cuestión de saber sacar el máximo partido a los huecos. Además, cada vez hay más opciones que hacen que dormir en el coche no sea necesariamente algo incómodo (colchones plegables o diseñados específicamente para dormir en el coche, sobrecolchones…)

3. Dificultad para irse de un lugar

Imagina que ya has encontrado el sitio perfecto para dormir esa noche. Echas los asientos para adelante, buscas un hueco para las cosas del maletero y extiendes el colchón. ¡Todo listo para descansar!

Cuando estás a punto de entrar en un apacible sueño, empiezas a escuchar un ruido que te despierta y te impide volver a dormir. Puede ser música alta, un macrobotellón o unos perros que no paran de ladrar.

Si estás en una furgoneta, probablemente sólo tengas que levantarte, sentarte en el asiento del conductor y arrancar. En un coche esta huida rápida se complica algo más.

Tendrás que salir del coche, recoger el colchón, volver a colocar las cosas en el maletero y echar de nuevo los asientos hacia atrás. Cuando termines, es posible que la fiesta haya terminado y ya sea la hora de la recena.

Conclusión

Como hemos visto, dormir en el coche tiene sus inconvenientes, pero también muchas ventajas. Personalmente, disfrutamos mucho de las opciones que nos da este tipo de viajes y seguiremos haciéndolo mientras sigamos en nuestra situación actual.

Muchas veces nos enfocamos tanto en lo que nos gustaría alcanzar, que pasamos por alto aquello que ya tenemos. Si, como nosotros, aún no puedes permitirte tener una camper, esperamos que este artículo te haya hecho ver que puedes vivir experiencias similares con tu coche.

No seré yo quien diga qué forma de viajar es mejor: en coche o furgoneta. Todo es cuestión de gustos y de prioridades, pero si algo está claro es que las dos tienen algo en común: la libertad de poder viajar sin necesitar nada más que tu vehículo.

Sigue a Juan en:

Instagram: @laeternidaddelviaje
Web: laeternidaddelviaje.com